‘La Vorágine’, la selva como personaje y espejo del alma de una novela colombiana
Una serie creada desde el apoyo de la televisión público y que toma mayor fuerza con el apoyo de HBO Max, que relata todo lo mejor de la misma.
Las calles colombianas guardan secretos a lo largo de su historia en donde miles de personas se han aventurado a soñar y retratar sus pensamientos en el arte, literatura, música y otras formas de expresión. Así sucedía en la Rivera, Huila, con José Eustavio Rivera, quien fue un reconocido escritor que dio vida a una obra que se volvió parte de la vida de millones: La Vorágine, una novela que ha sido llamada un clásico de la literatura hispanoamericana.
Una obra que, además, ha provocado diversas interpretaciones por lo complejo de su relato y lo enredado que puede llegar a ser para aquellos que poco control de lenguaje literario manejan. Pero su personaje principal: Arturo Cova, ha sido un símbolo, incluso, de revolución a la denuncia social. Pero para entender aún más a fondo el sentido de este producto, en 2024, el Ministerio de las TIC decidió darle forma y retratar la obra en una serie y darles una invitación a las nuevas generaciones a conocer sobre la literatura nacional.
“Protagonizada por Juan Pablo Urrego y Viviana Serna, ‘La Vorágine’ reconstruye con fuerza visual y narrativa una de las obras literarias más importantes del país. La serie es un reflejo de cómo la televisión pública colombiana puede innovar, emocionar y trascender fronteras”, indicaron.

Lo que significa mostrar ‘La Vorágine’ en una serie
Juan Pablo Urrego y Viviana Serna, le dan vida a Arturo Cova y Alicia, respectivamente, quienes son los protagonistas de esta historia y, sin duda, entender una obra tan compleja no fue fácil en especial por los cambios de postura tan fuertes que pueden tener los personajes a lo largo del camino.
“Arturo Cova es un personaje muy especial porque es un personaje que no es tan lineal, es un personaje que tiene muchas capas, que tiene muchos colores, es un personaje que puede ser el más romántico, pero también puede ser el más violento, puede ser el más enamorado, pero también el más machista, es un personaje mentiroso, es un personaje llevado por sus pasiones, entonces puede pasar de una escena donde está tranquilo y a la siguiente escena está haciendo una escena extremadamente violenta. Entonces, eso fue un reto para mí como llegar a esas emociones”, contó el actor Juan Pablo Urrego en diálogo con Blu Radio.
Asimismo, según Viviana Serna, el escenario donde se desarrolla esta serie: la selva del Casanare le dio aún mayor responsabilidad al sentido que tenían que narrar a la hora de interpretar a sus personajes, pues, a la final, también llegaban a sentirse influenciados por el turno, ya se por el clima o la cultura que los rodeaba.
“Poder haber hecho un rodaje que pudo haber sido bien complejo y difícil y no se sintió tan difícil como la gente se lo imagina. Obviamente, nosotros hablamos desde un lugar. Por favor entrevisten después al equipo técnico que tenía que cargar esas cámaras y caminar 20 minutos selva adentro, pues el reto es otro completamente distinto, pero sí, nuestro reto era jugar con, fluir y jugar y saber cómo manejar estos factores que no dependían de nosotros todos los días”, puntualizó la actriz.
¿Por qué volver esta novela en una serie?
Hay cosas que, a veces, no se logran apreciar de la misma forma a cuando se imaginan a cuando se ven, por eso, según Lucas Buelvas, entenderla desde una postura audiovisual le permite a que más personas comprendan una historia que, tal vez, suele ser difícil de digerir a simple vista.
“No, fue un reto de pies a cabeza, aquí como varios compañeros para mí era un poco ajeno, totalmente ajeno a esta cultura, no conocía el Casanare ni San José del Guaviare, sí, Fidel es oriundo de Antioquia, entonces sí tuve un poquito de conflicto con el acento, pero también hablando con Carlos Páramo, gracias, él me dijo, yo no creo que él hable como con un acento paisa tan marcado, yo lo tiraría más neutro, y en toda esa discusión yo llegué a una conclusión que podría tener un dejo paisa en algunos momentos”, añadió.
Por su parte, Tatiana Ariza encarna a La Turca, un personaje frío y complejo que representa la deuda histórica con los nativos, el poder y el dolor. “La Turca trafica con almas, con las deudas del otro. No es una mujer convencional, es una emperatriz de la selva”, comentó Ariza, destacando la responsabilidad de representar sin caricaturizar ni ofender las culturas ancestrales.
Para Nicole Santamaría, Griselda –su personaje– es una mujer resiliente y determinada, que representa la fortaleza femenina en medio del infierno de las caucherías. “Me dejó el aprendizaje de resistir, de mantenerse de pie, de seguir adelante pese a todo”, afirmó.
La selva, la literatura y la deuda con la historia
‘La Vorágine’ no es solo una historia de amor y tragedia. Es una denuncia de los horrores del auge del caucho, del olvido de nuestras comunidades indígenas y del poder corruptor del hombre. La serie, a través de ocho capítulos, reconstruye con fuerza visual y emocional este mundo brutal y mágico, tan real como literario.
El montaje narrativo –como explicaron los actores– juega con líneas temporales y puntos de vista distintos. La historia de Arturo y Alicia ocurre en siete meses, mientras que la de Clemente Silva se extiende mucho más, dando lugar a una narrativa rica y fluida. La edición, a cargo de Alejo Noreña, le otorga ese dinamismo necesario para mantener viva una historia que sigue resonando un siglo después de haber sido escrita.
Fuente: Blu radio