Más adelante, recordó el obstáculo que había entre los dos cuando se conocieron, pero que en poco tiempo desapareció.
“Me parecía lindo, pero nunca dejaba de ser solo eso, porque era el novio de mi amiga en ese momento. Cuando ellos terminaron, me empezó a llamar más de la cuenta”, agregó.
Al iniciar su noviazgo la presentadora creyó que su sueño se estaba cumpliendo, pues los primeros meses fueron como un verdadero cuento de hadas.
«Me invitó (con otras personas también) a un concierto de Ricardo Montaner en Cali, y allí nos dimos el primer beso. En ese momento me movió todo (…) “Los primeros meses fueron maravillosos, era especial, respetuoso, cariñoso y sensible”, recordó.
La pesadilla inició cuando él ingresó a la universidad y Carolina soportó varias de sus infidelidades.
“La primera vez que lo pillé fue un día en la discoteca más famosa de Cali… Llegué a la discoteca y apenas me bajé del carro me lo encontré a él de frente, cogido de la mano con otra mujer. Sentí que me moría, pero entré como si nada. Él entró solo y nunca supe qué pasó con ella porque cada uno se quedó en la discoteca por aparte. Le terminé un día, pero al otro ya habíamos vuelto”.
Entre las infidelidades que le perdonó fue cuando lo encontró en la cama con su exnovia, una mujer que fue su mejor amiga.
“Un día tuve que presenciar una escena horrible al tener que sacarlo de la cama de la casa de su exnovia, la que era mi amiga”.
El detonante que hizo que la relación llegara a su fin fue su agresividad y un escándalo que le hizo en un hotel cuando ella cubrió su primer reinado para el Canal RCN.
“Él se fue a vivir a Estados Unidos con su mamá después de una tragedia familiar, quedó debiéndome plata, y además me dejó con una deuda a su nombre del Icetex (que menos mal ya pagué). Decidí dejarlo y hacer mi vida en Bogotá al lado de mi familia y rodeándome de amor y seguridad que era lo que más necesitaba”, contó.